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#NosEstanMatando
Transcurridos solo algunos días de enero los tabloides nacionales ya empezaban a reportar el primer asesinato a líderes sociales en Colombia. Y como si se tratara de una cifra que aún no tocara fondo, sigue aumentando con el pasar de los días llegando ya a sumar seis en los primeros días del 2019. Los homicidios se presentaron en Valle del Cauca, Cauca, Norte de Santander, Magdalena y Antioquia.
Y aunque el gobierno puso en marcha en Plan de Acción Oportuna (PAO) dedicado a la protección de líderes sociales, pareciera que la violencia directa contra la población no cesara. Al primer líder asesinado en el 2019, Gilberto Valencia, no lo dejaron siquiera terminar de celebrar el año nuevo junto a su familia. El segundo día del año Jesús Adier Perafán, líder de Caicedonia-Valle Del Cauca, fue asesinado en una tienda de abarrotes. Dos días después (4 de enero) la víctima fue Wílmer Antonio Miranda, líder social en Cajibio-Cauca. Al anterior se suma el asesinato de José Rafael Solano, presidente de la JAC en el Jobo-Antioquia, y de Wilson Pérez Ascanio en la vereda de Los Cedros-Norte de Santander durante el mismo día. Y la lista (hasta el momento) finaliza con el asesinato a la primera lidereza, Maritza Quiroz Leyva, asesinada en su propia casa entregada a ella y otras nueve mujeres afrodescendientes víctimas de desplazamiento.
El gobierno aún no se ha pronunciado de forma directa, y la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez quien se pronunciara para repudiar de forma directa el asesinato de Quiroz Leyva, sin embargo, esta apertura del 2019 solo evidencia una situación delicada que pone en riesgo al activismo y el liderazgo comunal en Colombia.
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