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Vía Tom Ford Twitter
Por Andrés Astudillo. @andres_astu,Instagram.
Nueva york ha sido testigo del regreso triunfal a las pasarelas de Tom Ford, que ahora integra en su colección una explosión de color clásico, humor y romance sin olvidar por supuesto la cereza del pastel: La nueva línea de ropa interior.
Sabemos que Tom Ford es un referente de estilo y universo clásico que aunque sea una forma de identidad en la moda necesita entender los cambios de su propio mercado que exige reinvención y propuestas todo el tiempo.
Su “regreso” (aunque sabemos que nunca se ha retirado) radica en la versatilidad con la quiere mostrarse ahora. La marca ha intentado mostrar sus colecciones en una variedad de formatos y ubicaciones (Los Ángeles y Londres). La pasarela fue centro de miradas por las propuestas del diseñador pero también por el cierre de la misma en la que hombres ágiles pero fuertes aparecieron usando la nueva linda de la marca que cuenta con siete tonos de piel diferente, además de patrones como cebras y guepardos, o seda con cinturones de terciopelo.
TOP: Sin olvidar la función de la ropa interior, el diseñador ha experimentado nuevas propuestas, logrando combinar sedas con algodón y permitiendo la mayor comodidad sin perder el estilo.
La pasarela por su parte, presentó una extensa colección impregnada de una sensualidad sedosa y brillo, la paleta de negro, gris y blanco tenía indicios de los cambios personales por los que atraviesa el diseñador (quien ahora vive en el sur de California) con rosas Barbie y amarillo limón apagado.
Vía Vogue
“Hacemos trajes hermosos, y es una gran parte de nuestro negocio”, dijo Ford, “pero fabricamos una colección completa para hombres que no creo que la gente sepa que fabricamos: jeans, zapatos tenis, todo. Quería mostrar dónde estamos ahora mismo.” Esto también incluye piezas como: camisas en seda, chaquetas en lana y ropa con efecto metalizado para la noche, trajes a cuadros (para los siempre clásicos), chaquetas en gamuza y suéteres de cuello alto.
Sexy, algo de sentido del humor y esa chispa de romanticismo son la fórmula perfecta en una pasarela, que en este caso ha sido un claro ejemplo en la presentación del diseñador. Crear una recordación en los consumidores siempre es un trabajo extenso pero es algo que debe reconocerse en el sr. Ford quien articula perfectamente el glamour y estilo de sus prendas con la sexualidad y la masculinidad de los modelos que aparecen en sus publicaciones.
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